Noticias | - 2:06 pm
El tribunal de equidad de Delaware decidirá si el magnate es obligado a cerrar la fusión.
Twitter ha demandado a Elon Musk para obligarlo a completar la adquisición por 44,000 millones de dólares que acordó en abril. La compañía y Musk han estado preparándose para una disputa legal desde que el empresario señaló que se retractaba de su acuerdo para adquirir la red social.
La demanda de Twitter incluyó duras acusaciones contra Musk, informando que rechaza “cumplir sus obligaciones con Twitter y sus accionistas debido a que el acuerdo que firmó ya no beneficia a sus intereses personales”. “Después del espectáculo público para involucrar a Twitter, y habiendo propuesto y posteriormente firmado un acuerdo de fusión favorable al vendedor, Musk aparentemente piensa que él, a diferencia de cualquier otra parte sujeta a las leyes contractuales de Delaware, es libre de cambiar su decisión, manchar la imagen de la compañía, enturbiar sus operaciones y destruir el valor de los accionistas y retractarse”, asegura la demanda.
Twitter entabló su demanda ante el Tribunal de Equidad de Delaware, donde existen antecedentes que fallaron para obligar a un comprador arrepentido a concluir la operación inicial. Fue el caso del gigante de alimentos Tyson, que debió de cerrar su adquisición de Iowa Beef Processors (IBP), una empacadora de carne, tras una sentencia de 2001. El despacho que representó a IBP, por cierto, es el mismo que ha enviado la carta a Musk en nombre de Twitter.
Algunos expertos han puesto en duda que se siga ese camino con una ejecución específica en una situación como esta. Musk dijo el viernes que Twitter no había entregado información suficiente sobre el número de cuentas falsas en la plataforma, y señalaba también que Twitter violó el acuerdo de adquisición cuando despidió a dos miembros de la alta gerencia y a una tercera parte del equipo de reclutamiento.
Cuando Musk se ofreció a comprar la compañía, a mediados de abril, la junta directiva en un principio intentó bloquearla, sin embargo, poco después la empresa reconsideró la oferta llegando a la conclusión de que venderle la compañía a Musk a un precio de 54.20 dólares por acción era lo mejor para los accionistas. En un comunicado conjunto, Musk se comprometió a “desbloquear” el potencial de la red social al reducir las restricciones de libertad de expresión y eliminar las cuentas falsas.
Pero su confianza no duró mucho. Musk retiró su oferta de compra de Twitter tras ver cómo las acciones de Tesla, principal fuente de ingresos de Musk, se desplomaron en medio de una caída generalizada del mercado bursátil.
Fuente consultada: The L.A. Times
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