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Los 144 mil sellados

El capítulo 7 describe dos grupos de personas que prevalecerán en medio a los flagelos. El primer grupo es el de los 144 mil sellados.

El capítulo 7 describe dos grupos de personas que prevalecerán en medio a los flagelos. El primer grupo es el de los 144 mil sellados.

“¿Quién podrá sostenerse” El capítulo 7 describe dos grupos de personas que prevalecerán en medio a los flagelos. El primer grupo es el de los 144 mil sellados.

Después de esto vi a cuatro ángeles en pie sobre los cuatro ángulos de la tierra, que detenían los cuatro vientos de la tierra, para que no soplase viento alguno sobre la tierra, ni sobre el mar, ni sobre ­­­­ningún árbol.  Vi también a otro ángel que subía de donde sale el sol, y tenía el sello del Dios vivo; y clamó a gran voz a los cuatro ángeles, a quienes se les había dado el poder de hacer daño a la tierra y al mar,  diciendo: No hagáis daño a la tierra, ni al mar, ni a los árboles, hasta que hayamos sellado en sus frentes a los siervos de nuestro Dios.

Y oí el número de los sellados: ciento cuarenta y cuatro mil sellados de todas las tribus de los hijos de Israel. De la tribu de Judá, doce mil sellados. De la tribu de Rubén, doce mil sellados. De la tribu de Gad, doce mil sellados. De la tribu de Aser, doce mil sellados. De la tribu de Neftalí, doce mil sellados. De la tribu de Manasés, doce mil sellados. De la tribu de Simeón, doce mil sellados. De la tribu de Leví, doce mil sellados. De la tribu de Isacar, doce mil sellados. De la tribu de Zabulón, doce mil sellados. De la tribu de José, doce mil sellados. De la tribu de Benjamín, doce mil sellados. (Apocalipsis 7:1-8).

Hay muchas versiones con respecto a los 144 mil sellados. Algunos dicen que simbolizan a toda la iglesia, pero eso contraría el hecho de que esta ya se había ido en el arrebatamiento. La probabilidad es que se refiere literalmente a un remanente de judíos que serán escogidos para llevar el Evangelio a todas las naciones durante la Gran Tribulación. Se convertirán probablemente como resultado del ministerio de los dos testimonios, Moisés y Elías, que predicarán durante la primera mitad de la Gran Tribulación.

Un sello es un símbolo de propiedad y protección. Este grupo de personas será protegido por el Nombre de Dios en sus frentes – una marca que las diferenciará con los que llevarán la marca de la bestia en sus frentes o en la mano derecha. El Anticristo no podrá tocarlas ni los juicios que afectarán a la Tierra las alcanzarán. Será una época en la que todo el mundo tendrá claramente o la marca de Dios o la del diablo. Esa marca significará quién es el señor y dueño del alma de aquella persona. Eso ya sucede hoy, menos visiblemente.

El sello que los seguidores del Señor Jesús han recibido hoy es el bautismo con el Espíritu Santo. Dios coloca Su marca en aquellos que creen y practican Su Palabra. El sello del Espíritu es como una joya preciosa empeñada como garantía hasta el rescate final: la salvación eterna.

Es notable la ausencia de la tribu de Dan en esta lista, sustituida por la de Manasés, hijo de José. Todo indica que la razón fue que la tribu de Dan fue la primera de las tribus en introducir la idolatría al pueblo de Israel. Aquella imagen que levantaron para sí sirvió, más tarde, como lazo para la caída del reino de las diez tribus de Israel. Y, como consecuencia, Dios cumplió Su Promesa de borrar el nombre de los idólatras de en medio de Su pueblo.

Esta sustitución de la tribu de Dan es una alerta para los que tienen solo una fachada cristiana, pero no tienen el Espíritu ni el carácter del Señor Jesús. Son convencidos a la fe cristiana, pero no convertidos a ella. No sirven al Único Dios y Señor.

Continuará…

Libro: La Tierra va a Prenderse Fuego 
Autor: Obispo Renato Cardoso

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