Noticias | - 3:10 pm
El segundo país más poblado del mundo ha obtenido el récord de más muertes causados por el COVID-19.
India ha obtenido cifras dramáticas en relación con la pandemia. El 12 de mayo, alcanzó un nuevo récord de muertes ocasionados por el COVID-19 y superó la marca de 250 mil muertes. Ahora, la pandemia también está extendiendo por el vasto interior rural, que concentra 2/3 de la población, en el país que es el segundo más poblado del mundo, con alrededor de 1,300 millones de habitantes.
Ante esta situación, el pasado 8 de mayo, los voluntarios del proyecto UniSocial llevaron a cabo una labor enfrente a los Hospitales del Gobierno de Royapettah (uno de los famosos hospitales del gobierno), en Chennai, capital del estado de Tamil Nadu, al este de la India. Es decir, la institución ofrece tratamientos para pacientes de clase media y baja.
Los voluntarios, a menudo, han ayudado a las personas con sus oraciones y gestos de amor por los demás, entregando donaciones, especialmente a aquellos que no tienen lo básico para sobrevivir, como la comida, ropa y vivienda.
“Nuestro principal objetivo es enfocarnos en las personas de todas las edades. Ayudar y cuidar de a quienes más lo necesitan es un gesto de gran valor. Hace una gran diferencia en sus vidas. Recibir apoyo moral, mostrar humildad y respeto genuinos, les permite saber que alguien se preocupa por ellos. Esto les ayuda a superar las barreras que enfrentan todos los días”, comentó el obispo Alexandre Teixeira, responsable del trabajo de la Universal en el país.
Acciones y palabras de fe
En la ocasión, los voluntarios dieron una palabra de fe, así como de esperanza, además de ofrecer té a las personas que se encontraban o pasaban por el lugar. Por lo tanto, además de calentar el cuerpo físico, también brindaron consuelo a quienes están afligidos en este momento difícil.
“Nuestro papel es proteger a las personas vulnerables, desarrollar relaciones y, siempre que sea posible, ayudarlas a permanecer juntas. Tenemos el privilegio de apoyar a nuestra gente para que pueda vivir lo más felizmente posible en el camino de Dios. Como dice la Biblia: “El que se apiada del pobre presta al Señor, y Él lo recompensará por su buena obra.” (Proverbios 19:17), citó el voluntario Jayamathy Kumar.
Cada semana se llega a cientos de personas con estas acciones sociales.
“Estoy en tratamiento en este hospital. Vengo de una familia pobre y no tengo el apoyo de mis hijos. He enfrentado momentos difíciles en mi vida, todos los días. Cuando ofreciste el té, estaba ansioso por contestar e iniciar una conversación contigo. Tus palabras me animaron mucho. Muchas gracias por brindarnos una palabra de motivación. Le agradezco su esfuerzo. Cuidar de alguien es una forma sabia de bendecir al mundo”, reflexiona la paciente Vasantha.
El transeúnte Arvind reiteró: “No necesitamos ser ricos para ayudar a las personas en tiempos de crisis y pandemias. Se necesita un gran corazón. Aprecio este tipo de trabajo social, cuidando a las personas necesitadas, que son muy valiosas en este mundo. Es importante continuar haciendo este trabajo solidario por todas las personas que padecen hambre y pobreza”.
Fuente: universal.org
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