Noticias | - 9:15 am
El vicepresidente del país africano logra una ajustada victoria frente a su rival, que había recibido el respaldo del mandatario saliente.
Kenia ha elegido: William Ruto, de 55 años, será el quinto presidente del país africano tras unas elecciones marcadas por la baja participación, la ajustada victoria y la tensa espera por los resultados, que se han anunciado seis días después en la sede de la comisión electoral. Ruto, vicepresidente desde 2013, ha vencido con un 50,49% por poco más de 200.000 votos con respecto a su rival, Raila Odinga, que ha obtenido el 48,85% de los votos. El vencedor perdió hace años el apoyo de Uhuru Kenyatta, el presidente saliente tras agotar dos mandatos, que esta vez respaldó a su antiguo rival Odinga. Solo un 65% de los kenianos convocados a las urnas acudieron a votar, el porcentaje más bajo en 20 años.
La victoria llega con controversia. El caos se adueñó de la sede de la comisión electoral cuando, tras dos horas y media de espera, salió su presidente, Wafula Chebukati, a anunciar el ganador. Varios delegados de la parte de Odinga le impidieron subir al estrado a dar el resultado a empujones y tuvieron que intervenir los militares tras iniciarse una pelea. La victoria no ha sido solo ajustada en las elecciones presidenciales, sino también en las parlamentarias y en las que se elegía a gobernadores regionales.
La tensión fue creciendo por la duración del conteo, de seis días, a pesar de que horas después de cerrarse las urnas ya estaban subidos los resultados a la web de la comisión. Lo hizo el propio organismo en un ejercicio de transparencia, asegurando también que los resultados debían verificarse primero en la sede oficial de Nairobi. Esa transparencia se volvió en su contra, al comenzar distintos medios de comunicación su recuento particular, ofreciendo resultados contradictorios al empezar cada uno sus resultados por distintos distritos. El miedo a altercados tras el anuncio de los resultados paralizó el país de más de 50 millones de habitantes. Desde la semana pasada, las calles de Nairobi, la capital, han estado prácticamente vacías, con muchas oficinas implantando el teletrabajo y los comercios cerrados. Por el momento, al menos una persona ha fallecido en los altercados.
Cabe destacar que en los comicios de 2007 los observadores internacionales también afirmaron que habían sido unos comicios transparentes, a pesar de las irregularidades que llevaron a la peor violencia postelectoral en el país, que dejó más de 1.200 muertos y 350.000 desplazados.
La victoria de Ruto se ha basado en dos hechos clave: su apoyo a la región central y el impacto de su retórica, posicionándose como la única alternativa a las dinastías políticas en Kenia. La crisis económica y el hecho de que no hubiera ningún candidato de la etnia kikuyu han reducido el peso étnico en estas elecciones, Ruto no habría podido vencer sin el apoyo de esta etnia, mayoritaria en la región central. El principal reto del nuevo presidente será poder escuchar a todos los ciudadanos a los que apeló en campaña, junto a la lucha contra el cambio climático, cuyos efectos son palpables en el país africano, con una sequía que tiene a 4,7 millones de kenianos en situación de inseguridad alimentaria.
Por el momento, muchos celebran la victoria del hasta ahora vicepresidente: “Ruto sabe cuánto cuesta un paquete de leche; los otros no saben los problemas de la gente”, asegura Patrick, votante de 30 años.
Fuente Consultada: elpais.com
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