Noticias | - 5:03 pm
Las voluntarias del CBC en Orlando, apoyan a la comunidad local.
En asociación con Kiddie Academy, la Iglesia Universal llevó a cabo una labor social en beneficio de los niños, donde varias familias de la comunidad local fueron beneficiadas. Las voluntarias del CBC (siglas en inglés del centro bíblico infantil), en Orlando, Florida, ayudaron con la preparación del evento. Durante casi un mes, se recolectaron productos para bebés y recién nacidos, entre pañales, papillas, fórmula e, incluso, ropa.
Debido a la pandemia de COVID-19, muchas familias aún han enfrentado dificultades, especialmente aquellas con niños, donde la atención es aún mayor y especial, siendo el punto de enfoque de esta labor. Tales trabajos sociales semejante a esta está destinada a traer esperanza y confianza de mejores días.
Más de cien familias fueron beneficiadas y la alegría en el rostro de cada madre que recibió esta ayuda era incomparable. Todos los presentes recibieron no sólo la ayuda para sus hijos, sino también una Palabra de fe. Fueron beneficiados ambos los que recibieron la ayuda al igual de aquellos que estaban como voluntarios ayudando.
La palabra de Dios dice, “…Más bienaventurado es dar que recibir.” (Hechos 20:35).
Respetando todas las pautas de seguridad de la salud pública, los voluntarios siguieron los protocolos utilizando mascarilla y guantes, también se realizó la distribución de gel de alcohol a cada familia.
Mirar con sensibilidad a las necesidades de los demás y comprender la importancia de brindarles apoyo es lo que motivo a cada voluntario.
Rebeca Faria fue una de las voluntarias y organizadoras del evento, comentó sobre lo feliz que está de poder ayudar y contribuir en ese día.
“Durante la organización del evento, pensamos en hacer algo que ayudara a las madres y a los niños. Los pañales, la fórmula y la comida para los bebés son necesidades básicas para un bebé, y estamos consientes que durante la pandemia todo se volvió aún más difícil. Por este motivo, se tomó la decisión de aportar a la comunidad. No hay nada más gratificante que ayudar con la distribución que fue hecha. Fue un placer poder participar y conocer a las madres maravillosas y verlas sonreír a cada una de ellas. ¡Fue una mañana maravillosa, llena de alegría!”
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