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El ejecutivo venezolano Gustavo Arnal fue acusado en una demanda colectiva de fraude bursátil tras vender acciones de la compañía.
Gustavo Arnal, director financiero de la cadena de tiendas para el hogar Bed Bath & Beyond, falleció el viernes pasado tras caer desde el icónico rascacielos conocido como el “Edificio Jenga” en Tribeca. La prensa local apunta que se puede tratar de un suicidio. El ejecutivo había sido demandado hace unas semanas por fraude fiscal en una operación con acciones de la compañía donde trabaja.
Arnal, de 52 años, saltó desde el piso 18 de Leonard Street el viernes sobre las 12:30 horas, según informaron fuentes policiales al diario New York Post. También dijeron que la esposa de Arnal lo vio saltar. Si bien no se encontró una nota de suicidio, no se sospecha de ningún delito.
En Facebook algunos de sus amigos lo describen como un hombre entregado a su familia. “Vivimos muy de cerca la calidad de hombre que fuiste tanto como padre, esposo, hermano y amigo”, escribió Patricia Salcedo. Mientras Rocke Aguilera, expresó: “Tu paso por este mundo enriqueció muchas vidas”. Las personas que conocieron a Arnal dicen que era un hombre de familia, además de un gran compañero de equipo y líder.
“Nuestro recuerdo de Gustavo es el de un gran profesional y un hombre de familia feliz, muy dedicado a su hermosa familia”, dijo un excompañero de Procter & Gamble. Era un hombre muy inteligente que “trabajaba duro, jugaba duro”, “siempre dispuesto a compartir su energía con las personas que lo rodeaban, siempre tenía una sonrisa”, concluye.
El 17 de agosto, Bed Bath & Beyond se hundió en Bolsa tras conocerse que el inversor Ryan Cohen había puesto en venta el 10% del capital del grupo a través de su firma RC Ventures. El 16 de agosto, Arnal, vendió 55.013 acciones de la compañía, entonces valoradas en 1,4 millones de dólares, según cálculos de Reuters, a partir de registros del regulador SEC. El directivo aún contaba con otras 255.400 acciones en cartera.
La caída de Bed Bath & Beyond se aceleró a partir del 19 de agosto. Cohen, presidente de GameStop, se había hecho con esa participación a principios de año y había tratado de forzar varios cambios en la gestión en la compañía, pero unos meses después optó por deshacer su posición y hacerse con grandes ingresos aprovechando la subida de la cotización, ya que la acción había subido un 300% en un mes (en agosto) con gran volumen de negociación. Bed Bath & Beyond fue una de las firmas que se vio envuelta en la vorágine de las acciones meme (compañías cotizadas cuya cotización se ve impulsada por plataformas de pequeños inversores) durante el año 2021.
El 23 de agosto, la compañía, Arnal y el principal accionista Ryan Cohen fueron demandados entre acusaciones de inflar artificialmente el precio de las acciones de la compañía, en un esquema conocido como “pump and dump” (inflar y desechar). La demanda alega que Arnal y Chen vendieron sus acciones a un precio más alto después del esquema.
La demanda colectiva incluía a Arnal como uno de los acusados y fue presentada por un grupo de accionistas que afirmaban haber perdido alrededor de 1.200 millones de dólares.
La demanda presentada en el Tribunal de Distrito de Columbia alegaba que Arnal “aceptó regular todas las ventas internas” y usó “información privilegiada” para garantizar que “el mercado no se inundara con un gran número de acciones de BBBY en un momento dado”. La demanda también alegó que Arnal emitió declaraciones engañosas a los inversores. La compañía no quiso realizar comentarios a la demanda, según Reuters.
En el negocio, la cadena para el hogar pasa por horas bajas. Después de años en los que fue considerada como una compañía de referencia de productos para el hogar y el baño, la cadena empezó a tambalearse tras un intento de priorizar y vender más su propia marca, frente a marcas de terceros.
La pandemia, la crisis del sector y, más recientemente, el alza de la inflación y el freno de las perspectivas de consumo, supusieron el golpe final a la compañía. A finales de agosto, Bed Bath & Beyond anunció que cerraría 150 establecimientos y un plan para recortar un 20% de su plantilla de trabajadores, entre otras medidas para tratar de estabilizar su situación financiera.
El empresario tenía una licenciatura en Ingeniería Mecánica de la Universidad Bolívar de Venezuela y una master en finanzas de la Universidad Metropolitana de Caracas. Era considerado uno de los latinos con un mayor puesto en las grandes empresas de Estados Unidos, según la prensa local.
En 2021, ganó más de 2.9 millones de dólares gracias a su salario de Bed Bath & Beyond de 775.000 dólares y bonus en acciones.
El edificio de lujo de 60 plantas desde el que Arnal saltó es conocido por su diseño de apartamentos desalineados que se parecen al popular juego de mesa “Jenga”.
Fuente Consultada: Reuters
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