Diez consejos para una buena relación entre suegra y nuera
Denostada hasta la saciedad, la impopular figura de la suegra lleva años siendo el blanco fácil de bromas y chistes. Aunque la mala prensa que se asocia a este personaje es a menudo injusta, lo cierto es que a muchas mujeres el llevarse bien con sus suegras les supone un esfuerzo mayúsculo.
La incógnita del porqué de la difícil relación entre suegras y nueras ha sido objeto de numerosos estudios en el campo de la psicología. Tras 20 años de investigación, la Doctora Terri Apter concluyó que más del 60% de las mujeres tildan de hostil y difícil la relación que mantienen con la madre de su pareja. El 55% de las suegras, por su parte, afirman sentirse incómodas ante la presencia de sus nueras.
Cuando ni nuera ni suegra quieren aceptar que ambas necesitan reconocimiento y respeto mutuo, el conflicto puede agravarse, provocando incluso depresión o histeria. La mala relación acaba resultando en una guerra en la que no hay bandos ganadores, solo perdedores. Por ello, si usted es de los que dice “no soporto a mi suegra” o “mi suegra es mala persona” y en su mente resuenan otras frases de suegras malas, debe intentar acabar con este problema.
Existen una serie de actitudes que puede modificar para dejar atrás una relación de nueras y suegras tóxicas. Por ello, si está en un caso de que estas personas son conflictivas y manipuladoras, siga estos consejos:
Nuera
- Póngase en su situación: Piense que algún día usted también tendrá hijos e imagine los sentimientos que esto le despertará: celos, temor a perder lo que ama incondicionalmente, miedo a la soledad, nostalgia, etc. Por ello, es vital que entienda que su suegra pueda sentir celos y envidia de usted.
- Evite la rivalidad: Acepte la experiencia de su suegra y busque su consejo para hacerla sentir que la valora. Asuma que las dos tienen defectos y esfuércese por mantener la cordialidad, por el bien de su relación de pareja.
- No compare: No deje que la relación que mantiene con sus propios padres sea el único espejo en el que mirarse, el trato es muy diferente y comparar no hará que las cosas cambien. Comparar la relación de su suegro o suegra con su propia familia solamente hará que se enfoque en lo malo.
- Escoja bien sus palabras: Si hay alguna actitud de su suegra que le está molestando y haciendo daño, no deje que el problema se haga más grande ni tampoco se lo recrimine a su pareja. Cuéntele a su suegra cómo se siente cuando los ánimos estén calmados, remarcándola que aprecia su implicación pero deje claro, de la manera más cordial posible, que tiene derecho a tomar sus propias decisiones.
- No falte nunca al respeto: Aunque la relación sea muy tensa, nunca cruce la barrera del respeto; es la madre de su pareja y sus vidas van a estar ligadas siempre, por mucho que no le guste.
Suegra
- Acepte que su hijo ha crecido: En ocasiones no podemos evitar ver a nuestros hijos como los niños que un día fueron. Tenga en cuenta que él toma sus propias decisiones y desarrolla su vida de manera independiente. En realidad, lo que debe pensar es que lo mejor que puede hacer por su hijo es que usted como suegra y su nuera tengan una buena relación por el bien de todos.
- No intente imponer sus normas: Usted ha criado a su familia de la mejor manera que ha sabido. Es el turno de que su hijo y su pareja determinen por sí mismos el camino a seguir, tanto en lo relativo a la educación de sus nietos como en la forma en la que llevan su casa.
- No quiera cambiar a su nuera: Seguramente imaginaba a la nuera perfecta y al final no se han cumplido sus expectativas. Acepte que su nuera tenga su propia personalidad y, aunque no comparta algunas de sus formas de actuar o de pensar, tenga en cuenta que son precisamente esas características las que han enamorado a su hijo.
- Acepte que cada una tiene sus roles: Desear lo mejor para un hijo es normal, pero no quiera que lo atienda igual que lo hace usted. Aprenda a diferenciar entre el amor hacia un hijo y el amor de una pareja.
- Ofrezca su ayuda, no imponga su criterio: Aunque a veces no lo sepa ver, su nuera valora que sea una mujer más experimentada y aprecia que intente orientarla. Sin embargo, las decisiones que ella toma quizás no serán las que usted hubiera tomado, pero debe entender que no se trata de su vida, sino de la de su nuera.
La relación entre suegras y nueras siempre ha estado en el punto de mira. Pero en la realidad, existen muchas suegras y nueras que tienen un vínculo de madre e hija. Reforzar estos vínculos es posible, ya sea a través de una terapia familiar o con el esfuerzo de las dos. La familia es la base para encontrar la felicidad.
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