Noticias | - 4:16 pm
Diferentes agencias californianas trabajan en equipo para impedir más incendios forestales.
Los incendios forestales han sido motivo de preocupación para el departamento de bomberos en California durante más de medio siglo. Las precauciones se han extremado en los últimos años tras los devastadores incendios ocurridos especialmente en los meses de verano, cuando las altas temperaturas y el viento aumentan el riesgo dramáticamente.
Según las autoridades de California, para proteger los bosques del fuego con estas condiciones medioambientales, será necesario que agencias federales, locales y estatales unan sus esfuerzos.
La amenaza es constante, en los últimos cinco años hemos sido testigos de los incendios más devastadores de la historia, destacando los ocurridos en 2019 en Australia y en 2018 en el condado de Butte en California, que arrasó más de 60.000 hectáreas y dónde murieron 85 personas.
En 2021 se quemaron más de un millón de hectáreas en 8000 incendios que arrasaron más de 1500 edificios y viviendas. La sequía, las altas temperaturas y el calentamiento global parecen ser los factores que han provocado el empeoramiento en las condiciones medioambientales que originan estos devastadores incendios.
David Ruiz, portavoz del departamento de bomberos de California, nos cuenta que “las condiciones medioambientales actuales han provocado incendios que nunca habíamos combatido”, y aunque rechaza hablar del cambio climático como causante del cambio, aclara que “el nivel de sequía y el viento combinados” han afectado su trabajo de extinguir estos fuegos. “La temporada de riesgo siempre ha sido entre los meses de agosto y octubre”, pero en los últimos años se han originado grandes incendios “en épocas donde históricamente nunca antes habían sucedido”.
La fundación Tahoe Truckee Community, que promueve servicios de ayuda para la comunidad, está trabajando en un programa para recaudar 30 millones de dólares durante los próximos tres años que serán destinados a proyectos para combatir los incendios. Por el momento llevan recaudados casi dos millones.
Toda ayuda parece poca como admite David Ortiz, que espera “tener todos los recursos necesarios este año” e informa que existe “buena colaboración entre todas la agencias y hay 3200 bomberos activos actualmente” pero advierte que también “la participación civil es fundamental para prevenir estos fuegos”.
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