Noticias | - 8:00 am
Alégrate ahora mientras eres joven y puedes aprender fácilmente
¿JOVEN FRACASADA? No es que no tuviese sueños; en realidad los tuvo e incluso luchó por muchos de ellos; pero, aun así, debido a las muchas distracciones que la cercaban, acabó desanimándose y sus sueños se fueron río abajo. Hoy esa joven es una fracasada, aunque no lo admita. Piensa que es el centro de atención, con su belleza fascinante y la admiración de las personas que la rodean… Pero hay momentos, que sólo ella conoce, en los que se siente vacía y triste, como si nada más valiese la pena.
Ésta ha sido la vida de muchas jóvenes en la iglesia. Tienen tanto potencial y talento que cualquier persona diría que lo tienen todo para ser exitosas con Dios a su lado; pero en realidad, todo lo que les rodea es el mundo y sus muchos atractivos. Diversión es todo lo que quieren y lo que buscan en esta vida. Pierden el tiempo con cosas que no ayudan en nada a su vida espiritual, tales como: fiestas, cine, música, Internet, juegos y novios. Tal vez sea un poco brusco decir que son “fracasadas”, pero piénsalo bien: Si tú pierdes la mayor parte de tu tiempo con cosas vanas ¿qué puede decirse a su favor? ¿Piensas que estás en el camino del éxito?
El éxito se conquista. ¡No cae del cielo! Lo que somos hoy es el resultado de lo que fuimos e hicimos en el pasado. Por eso, si lo que fuimos e hicimos fue vano, sólo podemos esperar una vida vacía y triste: “Alégrate, joven, en tu mocedad, y tome placer tu corazón en los días de tu juventud. Sigue los impulsos de tu corazón y el gusto de tus ojos; más debes saber que por todas estas cosas, Dios te traerá a juicio. Por tanto, aparta de tu corazón la congoja y aleja el sufrimiento de tu cuerpo, porque la mocedad y la primavera de la vida son vanidad. Acuérdate, pues, de tu Creador en los días de tu juventud, antes que vengan los días malos y se acerquen los años en que digas: No tengo en ellos placer” (Eclesiastés 11:9,10; 12:1).
La adolescencia es como un colegio donde aprendemos lo que es bueno y lo que es malo y nos preparamos para la vida adulta. En cambio, si piensas como la mayoría de las jóvenes, entonces usarás tu adolescencia para divertirte, y, más tarde, cuando seas adulta, serás exactamente igual a otras adultas: triste, sola, llena de sentimientos de culpa por el pasado y con la sensación de haber desperdiciado toda tu vida.
Alégrate ahora mientras eres joven y puedes aprender fácilmente. Aprovecha la oportunidad para construir un buen comienzo, para que tanto en el medio como en el final de tu vida puedas cosechar buenos frutos. Planea el futuro con sabiduría y no desperdicies el tiempo y tu energía en cosas que no mejoran para nada tu vida. Alégrate en tu juventud, invierte en tu vida espiritual, prepárate para el futuro y para cuando vengan las dificultades. Prepárate para una relación que durará toda la vida. Hay tanto en lo que invertir mientras se es joven y tanto que conquistar para el resto de la vida ¿Por qué desperdiciar esta oportunidad? Piénsalo bien. Pero si, aun así, decides desperdiciar tu juventud, acuérdate de culparte a ti misma por tus fracasos, pues fuiste tú quien decidió seguir a la multitud buscando el camino más fácil y la diversión temporal.
Continuará…Libro: Mejor que comprar zapatos
Autor: Cristiane Cardoso
Si le interesa lea también: El día en que nací
Ubique la Universal más cercana a usted: Direcciones
Si usted tiene una pregunta o le gustaría una orientación: Contáctenos
Si usted le gustaría añadir su nombre y el de su familia en el libro de oración: Libro de Oración
Regrese a la página principal: Página Principal
Alimente su espíritu, leyendo mensajes de fe para su edificación espiritual: Viviendo por la fe