Noticias | - 10:22 am
El cuarto ángel derramó su copa sobre el sol; y al sol le fue dado quemar a los hombres con fuego. Y los hombres fueron quemados con el intenso calor; y blasfemaron el nombre de Dios que tiene poder sobre estas plagas, y no se arrepintieron para darle gloria. (Apocalipsis 16:8-9).
Al ser alcanzado por el cuarto ángel, el sol emitirá suficiente calor para causarles quemaduras a los seres humanos que les provocarán dolores agonizantes- una previa del propio infierno. Será una prueba más que toda la naturaleza estará en conflicto con el hombre- un recado inconfundible de los juicios de Dios. Muchas veces, Dios permite que una persona llegue a situaciones difíciles para que reconozca sus caminos equivocados y se arrepienta con sinceridad. Pero, lamentablemente, incluso con tamaña agonía, sufrimiento y dolor, los hombres no se humillarán delante de Dios. Al contrario, blasfemarán contra Él y Lo culparán por todo aquello.
El quinto ángel derramó su copa sobre el trono de la bestia; y su reino se quedó en tinieblas, y se mordían la lengua de dolor. Y blasfemaron contra el Dios del cielo por causa de sus dolores y de sus llagas, y no se arrepintieron de sus obras. (Apocalipsis 16:10-11).
Las cuatro primeras copas fueron dirigidas a elementos de la naturaleza. Ahora el propio Anticristo es alcanzado, juntamente con sus súbditos, y la plaga se manifiesta a través de tinieblas y dolorosas llagas. Será un ataque frontal al mal. Las personas morderán sus lenguas de dolor, pero eso no las moverá a pedirle perdón a Dios ni a arrepentirse. Es mucho orgullo…
El sexto ángel derramó su copa sobre el gran río Éufrates; y sus aguas se secaron para que fuera preparado el camino para los reyes del oriente. Y vi salir de la boca del dragón, de la boca de la bestia y de la boca del falso profeta, a tres espíritus inmundos semejantes a ranas; pues son espíritus de demonios que hacen señales, los cuales van a los reyes de todo el mundo, a reunirlos para la batalla del gran día del Dios Todopoderoso. (He aquí, vengo como ladrón. Bienaventurado el que vela y guarda sus ropas, no sea que ande desnudo y vean su vergüenza.) Y los reunieron en el lugar que en hebreo se llama Armagedón. (Apocalipsis 16:12-16).
La sexta copa es derramada sobre el Éufrates, el más grande y más importante río de Asia occidental. El río se secará completamente, dejando de ser una frontera protectora al oriente. Israel correrá el mayor peligro de su existencia, cuando los líderes de las naciones, dirigidos e instigados por espíritus demoniacos, se unan para destruir a Israel y a Su Ungido. Allí, el Señor Jesús aparecerá personalmente con Sus ejércitos celestiales y librará a Su pueblo, Israel, instaurando Su Reino de Justicia.
Armagedón significa “valle de la decisión”, pues allí se decidirá el futuro de toda la Tierra. También es conocida como “valle de Josafat”, pues Josafat significa “el Señor juzga”. Será en el Armagedón que el Señor juzgará a las naciones que, bajo el comando del Anticristo, invadirán a Israel para destruirlo. En este valle sucederá la disputa final entre el Señor Jesús y el Anticristo, y, claro, el vencedor será el Hijo del Altísimo.
Continuará…
Libro: La Tierra va a Prenderse Fuego
Autor: Obispo Renato Cardoso
Si le interesa lea también: Las tres primeras copas
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