Las motivaciones

Responda con honestidad: ¿Por qué quiere estar de novio con aquella persona?

Las motivaciones

Antes de comenzar una relación, es muy importante evaluar las reales motivaciones de la otra persona y también las suyas. Las razones por las que una persona quiere entrar en una relación son cruciales para determinar el futuro de la misma. Si esas razones son incorrectas, la relación será desastrosa, aunque comience maravillosamente bien.

Responda con honestidad: ¿Por qué quiere estar de novio con aquella persona? ¿Ella es un pasaporte para que usted se vaya de la casa de sus padres? ¿Conquistarla sería un trofeo para exhibir ante sus amigos? ¿Quiere probarle a su ex que usted también ya está en otra? ¿Siempre fantaseó con llevar a una mujer como esa a la cama? ¿Su edad está pesando y necesita casarse antes de los 30, 35 o 40?

Evalúe bien sus reales motivaciones. El corazón es muy engañoso y mentiroso. Usted puede decir las palabras correctas, que le gustó aquella persona, que quiere hacerla feliz, etc. —, pero en el fondo sus labios pueden tan solo estar siendo rehenes de su corazón. O peor: ¿ya pensó si usted es sincero y verdadero, pero la otra persona tiene las motivaciones incorrectas? Usted tiene que poner a prueba las motivaciones de la otra persona y mantener los ojos bien abiertos antes y durante el noviazgo, pues ellas no siempre son evidentes.

Por eso, no tenga miedo de preguntar las cosas. Pregunte, ¡y pregunte mucho! — Y desconfíe si la persona se incomoda con sus preguntas.

Estar de novios es compartir pensamientos. Ustedes tienen que descubrir las intenciones, ideas y voluntades uno del otro y ver si podrán convivir con ellas en el matrimonio.

Claro, tal vez no pregunte todo en el primer encuentro, pero si ustedes ya pasaron del tercer mes de noviazgo y aún no hicieron ni respondieron a las preguntas más difíciles uno sobre el otro, entonces no están practicando un noviazgo blindado.

Usted tiene que saber todo y un poco más sobre aquella persona. Por ejemplo:

¿Cuál es tu nombre? ¿Ese es tu nombre verdadero? ¿Puedo ver tu documento? ¿Fue tu padre o tu madre que te dio ese nombre? ¿Conociste a tu padre? ¿Él conoció a su padre? ¿Tu padre todavía está casado con tu madre? Ah, ¿él murió? ¿Tu madre fue descartada como sospechosa por su muerte?

¿Cuál es la relación que tu madre tenía con tus exnovias? ¿Necesito colocar un gas pimienta en mi cartera cuando vaya a visitarla? ¿Por qué terminó tu última relación? ¿Fuiste tú quien terminó o tu ex? ¿Qué entiendes por “terminó”? ¿Si yo miro tu celular, voy a encontrar mensajes de ella diciendo que “extraña los viejos tiempos”?

¿Cómo es tu relación con tu celular? ¿Crees en la privacidad en el matrimonio o en la transparencia total? ¿El servicio es con o sin contrato? Si es con contrato, ¿pagas la cuenta al día? ¿Tienes deudas? Si mueres mañana, ¿tienes dónde caerte muerto o tus amigos del Facebook tendrán que hacer una colecta para enterrarte?

¿Crees en la vida después de la muerte? ¿Y en la vida más allá del sofá y del control remoto? ¿Crees en Dios o eres pagano? ¿Sacrificas animales los viernes a la medianoche? ¿Debo preocuparme si tenemos un perrito?

¿Te gustan los animales? ¿Qué tipo de animales? ¿Crees que los animales deben tener su propia cama o compartir la cama de sus dueños? ¿Lograrías vivir sin una mascota? ¿Y respecto a los hijos? ¿Quieres tener uno, ninguno, dos, o uno por año hasta que dejes de ovular? ¿Crees en dejar el trabajo para criar a los hijos o en trabajar más para pagarle a una niñera? Y si la niñera es algo bonita, solo un poco — ¿tendrás celos de mí? ¿Eres muy celosa? ¿Qué haces cuando tienes celos? ¿Lloras, te vas o lanzas las cosas? ¿Puedo mirar a los costados cuando estoy a tu lado, en el shopping o conduciendo? ¿Debo comprar una visera?

¿Tus ojos son verdes realmente o son lentes de contacto? ¿Ese es tu cabello? Cuándo te despiertas a la mañana, ¿tienes esa cara realmente? ¿Puedo verte sin maquillaje en el próximo encuentro? ¿Cuántas veces al día te cepillas los dientes? ¿Te bañas a la mañana o a la noche? ¿Te llevas bien con el agua y el jabón? ¿Crees en estar algunos días sin bañarte en invierno? ¿El agua y el jabón te dan voluntad de masturbarte?”

¿Eres adicto a la pornografía? ¿Crees que la pornografía condimenta la relación o es pimienta para los ojos de la mujer?

Ok, humor aparte, esas preguntas no son una exageración. En realidad, esa es la versión corta. Ni mencioné que usted debe hacer una búsqueda en Google y en las redes sociales con el nombre de la persona y ver lo que aparece… Nunca se sabe.

Sí, a lo largo del noviazgo, usted debe preguntar todo, saber todo — y también responder a todas las preguntas que el otro quiera hacerle. Y si no pasó por la mente de él o de ella preguntar algo que usted sabe que es importante, usted debe adelantarse y revelar lo que debe ser revelado. Nada de sorpresas después del casamiento.

Y después de oír las respuestas, su trabajo no terminó. No confíe en todo lo que oyó. Usted tendrá que seguir el consejo de Ronald Reagan:

Confíe, pero verifique.

Si lo que oyó no concuerda con lo que las otras personas dicen al respecto o con el comportamiento de su pretendiente, mejor no proseguir.

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