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Pero los cobardes, incrédulos, abominables, asesinos, inmorales, hechiceros, idólatras y todos los mentirosos tendrán su herencia en el lago que arde con fuego y azufre, que es la muerte segunda. — Apocalipsis 21:8
Juan destaca algunos tipos de personas que no tendrán el derecho de entrar en la Nueva Jerusalén y serán lanzados en el lago de fuego y azufre, juntamente con Satanás, el infierno, la muerte, el Anticristo, el falso profeta y todos los que rechazaron la salvación. Son ellos:
Cobardes — en el sentido espiritual, son los que no perseveran en la fe cristiana debido a las persecuciones, difamaciones e injusticias sufridas. La timidez en la fe, que es la peor cobardía espiritual que existe, es una ofensa para Dios, que nos empoderó con inmensa autoridad y determinó que todo le es posible al que cree. Curiosamente, son los primeros de la lista.
Incrédulos — son los que dudan de la Palabra de Dios e incluso se burlan de aquellos que creen.
Abominables — esa palabra significa “personas que se hicieron detestables” por sus delitos y comportamientos deliberadamente repulsivos a Dios y al prójimo.
Asesinos — en el lenguaje divino, asesino no es solo aquel que le quitó la vida a alguien, sino también el que odia a su semejante.
Inmorales — son aquellos que viven en la práctica sexual fuera de la alianza del matrimonio.
Hechiceros — los que practican la hechicería, los supersticiosos, aquellos que toman decisiones de acuerdo con los adivinadores, los pronosticadores y los practicantes del ocultismo. Se incluye en este grupo a los que se rebelan contra las autoridades espirituales. La rebeldía es considerada tan seria como el pecado de la hechicería (ver 1 Samuel 15:23).
Idólatras — los que aman, veneran o consideran a alguien o a algo como dios o más que a Dios. En otras palabras, idolatría es colocar en primer lugar en la vida a cualquier persona o cosa, en el lugar que debería ser ocupado solo por Dios.
Todos los mentirosos — la única categoría con el énfasis “todos”. Dios odia la mentira, pues el diablo es su padre. Mentirosos son los que distorsionan o niegan la verdad. Esta lista obviamente no está completa, o sea, no incluye a todos los tipos de personas que no heredarán la salvación. No están aquí, por ejemplo, los religiosos hipócritas, a los que el Señor Jesús severamente condenó. El propósito de esta lista es resaltar actitudes que son notoriamente condenables.
Claro que la inclusión de estas personas en esta lista no significa que quien practica o practicó estas cosas no tiene salvación. Al contrario, el Cielo estará lleno de personas con uno o más de esos pecados en su currículum terrenal… Aquellos, sin embargo, que no recibirán la salvación será porque no se arrepintieron de esos pecados ni entregaron sus vidas al Salvador. Esos recibirán la muerte segunda — pasar la eternidad lejos de la presencia de Dios y en tormentos.
Continuará…
Libro: La Tierra Va A Prenderse Fuego
Autor: Obispo Renato Cardos
