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Recibía siempre diferentes diagnósticos de su estado de salud
Adriana Pereda de niña solía escuchar voces que la atormentaban, seguida de alusiones que no la dejaban pegar un ojo por las noches, estos tormentos espirituales la habían transformado en una niña insegura. Sufría, además, de dolores insoportables en su cuerpo, viéndose incapacitada a confrontar dichas dolencias debido a que recibía siempre diferentes diagnósticos de su estado de salud.
Su condición era tan sensible que incluso sufría de constantes desmayos en público, por lo que optó por abandonar sus estudios debido al miedo de que algún no pudiera ser auxiliada, debido a esto Adriana Pereda comenzó a sentirte deprimida y con el pensamiento de que no podía llevar una vida normal.
Cuando Adriana Pereda salía de su casa era imposible que alguien notara su sufrimiento, puesto que a ella le gustaba lucirse como el alma de la fiesta, pero la verdad es que su orgullo no le permitía expresar lo débil que se sentía, lo que la dejaba sola lidiando con tanto quebranto que llevaba dentro.
No existía forma de que Adriana Pereda no sintiera que todo era desdicha en su vida, este constante pensamiento la hizo contemplar el suicidio, y aunque tomaba siempre la determinación de acabar con su vida, lo que más le frustraba eran sus fracasos en sus fatídicos intentos.
Un viernes en la noche pudo ver en la televisión el programa de la Iglesia Universal que se transmitía en ese momento y pudo verse reflejada en los testimonios de una de las personas que había logrado cambiar su vida a través de la fe. Cuando Adriana salió después de su primera visita a la casa de Dios pudo notar cómo por dentro se llenaba de una ilusión que le hacía creer que a partir de ese momento todo sería diferente.
Adriana confiesa que no hay palabras en esta vida para describir la dicha de haber recibido al Espíritu Santo dentro ella, el cual ha transformado su vida y la ha llenado de armonía y no ha dejado ni huellas de esos tormentos espirituales que algún día le causaron mucho daño.
Testimonio Adriana Pereda.
¿Usted no logra ser saludable? ¿Usted ha sido internado en hospital? ¿Usted sufre con depresión, nerviosismo, insomnio, migrañas, desmayos, es dominado por el miedo, no logra ser saludable, sufre con una enfermedad cuyo diagnóstico no es identificado? No falte este domingo, donde será realizada una oración de fe para el libramiento de todo mal en su vida. Acompáñenos este viernes en el 703 S Broadway, en la esquina de la calle 7 en Los Ángeles, California, o en el 625 S Bonnie Brae, Los Ángeles, CA y en la Universal más cercana a usted.
