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Solía frecuentar personas que estaban involucradas en actividades criminales

Sabía que en el fondo estaba obrando mal como un hombre de familia

Solía frecuentar personas que estaban involucradas en actividades criminales

Jesús Castillo era prisionero de los vicios de las drogas y el alcohol, solía frecuentar malas juntas, personas que estaban involucradas en actividades criminales como la venta de drogas en las calles, personas armadas e integrantes de bandas. Sabía que en el fondo estaba obrando no solo como un mal esposo sino como un mal padre.

El entorno en que solía estar envuelto Jesús Castillo lo habían transformado en una persona violenta y agresiva capaz de arremeter de manera física hacia su esposa e hijos, quienes vivían atemorizados ante las impulsivas reacciones violentas que él solía tener. El remordimiento lo consumía cada vez que la tormenta bajaba y se daba cuenta de todo el daño que había causado a su alrededor debido a su conducta, se avergonzaba de sus hechos, pero cada vez que se encontraba bajo los efectos de las drogas o el alcohol su conducta se repetía una y otra vez.

Jesús Castillo llegó al punto de su vida donde no sabía cómo detenerse, a pesar de su lucha, continuaba atrapado en el fondo de un pozo que él mismo había cavado para sí.

Desde hace un tiempo ya su esposa se había entregado a la fe a través de sus oraciones en la Iglesia Universal, lugar desde donde ella luchaba para restaurar su familia, sin embargo, Jesús Castillo hacía caso omiso a las intenciones de su esposa. Su necesidad por ese cambio tan anhelado le dio el impulso para comenzar a asistir a la Iglesia Universal y recibir dentro de él al Espíritu Santo, el cual lo ayudaría a acabar con esa vida llena de vicios, violencia y delincuencia.

Hoy en día gracias a que decidió luchar junto a su esposa por la restauración del hogar ha logrado recibir de Dios todas las certezas para construir y mantener una familia unida a través del amor y sobre todo comprometidos con la fe.

Testimonio Jesús Castillo.

¿Usted no logra ser saludable? ¿Usted ha sido internado en hospital? ¿Usted sufre con depresión, nerviosismo, insomnio, migrañas, desmayos, es dominado por el miedo, no logra ser saludable, sufre con una enfermedad cuyo diagnóstico no es identificado? No falte este domingo, donde será realizada una oración de fe para el libramiento de todo mal en su vida. Acompáñenos este viernes en el 703 S Broadway, en la esquina de la calle 7 en Los Ángeles, California, o en el 625 S Bonnie Brae, Los Ángeles, CA y en la Universal más cercana a usted.

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