Noticias | - 5:19 pm
Tal vez, por dentro, se siente vacío y solo. Los errores del pasado lo atormentan cuando está a solas. Todos los días se pregunta: ¿cómo puedo salir y empezar de nuevo?
La Biblia nos enseña lo siguiente:
“El que cree y es bautizado será salvo; pero el que no cree será condenado” (Marcos 16:16).
En la Biblia, la palabra “cree” se refiere a la confianza (fe). Este versículo nos llama a confiar en Jesús y en Su sacrificio antes de bautizarnos. Creer es un compromiso, no solo un hecho o algo que se dice.
El bautismo representa arrepentimiento, limpieza espiritual y unión con Cristo. Por eso también es un llamado a la salvación.
La salvación incluye el perdón de todos nuestros errores, la reconciliación con Dios y la paz eterna. Sin embargo, es más que una promesa futura que se vive después del bautismo; es una vida completamente nueva que comienza en el momento en que uno toma esa decisión.
La condenación implica permanecer en el mismo vacío que se siente. Dios no obliga a nadie a seguirlo ni a bautizarse; Él invita para que dejemos de sufrir. La condena nos recuerda que el bautismo no es para Él, sino para que nosotros tengamos una relación con Él.
Rechazar la fe en Cristo es la verdadera condena. No creer en Él nos separa de la fuente de alegría, amor y paz que nuestro interior necesita para estar bien.
No permita que el mal lo engañe haciéndole pensar que su vacío, soledad o dificultad es un castigo. Es el momento de descubrir la fe en el sacrificio de Jesús, quien pagó el precio por todo nuestro sufrimiento y errores.
En el Santuario de la Familia de Dios hablaremos en profundidad sobre lo que significa ser bautizado y todas las victorias que esta decisión trae a su vida.
📍 625 S Bonnie Brae St, Los Ángeles, CA 90057
